• 20/05/2024 12:44

Culpa y perfección: ¿van de la mano?

Ene 11, 2024

¿Te pasó alguna vez compararte con alguien?

¿Cómo te hace sentir eso?

¿En qué aspecto hacés foco? ¿En lo que te falta o en lo que ya tenés?

¿Sentiste culpa para priorizarte a vos y no a los demás?

Por millones de años vivimos en comunidad, y eso nos sirvió para mantenernos como especie. Pudimos superar obstáculos y luchar contra depredadores, que, si no fuera porque estábamos en grupo, ya no existiríamos como especie.

Con el paso del tiempo, el avance y la llegada de los medios masivos de comunicación, comenzamos a ver y vivir realidades muy diferentes de las que estábamos habituados.

A través de los YouTube y redes sociales, pudimos conocer otros lugares, otras culturas, incorporar nuevos estilos de vida. Pero también tuvimos acceso a ver cómo vivían otras personas, especialmente las estrellas de fútbol, modelos, actrices y actores, como las personas viven en otros países, etc.

Esta idea de perfección, se enquistó en nuestras vidas, por el bombardeo de información de los medios, revistas, películas, concursos de bellezas, video clips de cantantes, publicidades, etc.

Esto no fue gratuito, fuimos “comprando esta idea”. Nadie las cuestionaba y ni siquiera se dimensionaba el efecto en las personas. Por ejemplo, un aspecto de esta situación, es el complejo y no aceptación de nuestro cuerpo o el paso del tiempo – quedar “viejos”.

Como humanos, siempre buscamos pertenecer. Ser parte de algo, una sociedad, familia, grupo de amigos, etc. Somos seres sociales por naturaleza. Y vamos a hacer todo, para lograrlo y pertenecer. Y muchas veces lo hacemos de manera inconsciente.

Hoy, la idea de esta nota, es tomar conciencia de lo que hacemos, de cómo nos hace “sentir eso que hacemos”.

La idea de “perfección”, viene de un modelo, un estereotipo, es decir tomar ciertos parámetros como los “normales” y que todos deben cumplir con ellos. Es decir, que, si no estás dentro o cerca de ellos, te sentís mal. Sentís “culpa” y crees que algo estás haciendo mal o peor aún, tenés que hacer algo para encajar en ese “modelo”. Ej: modelo de familia, modelo del cuerpo “correcto”, modelo de pareja, modelo de estilo de vida, etc.

La pregunta es, ¿modelo según quién, quiénes? ¿quién dice que esto debería ser así?¿quién se beneficia con esto? ¿estoy más felíz comportándome según estos modelos? En esta idea inconsciente que tenemos de pertenecer tan arraigada, no nos cuestionamos si elegimos o no eso. Siempre digo, que no hay nada bueno o malo, sino cómo nos sentimos haciendo esas “cosas que hacemos”. También pasa, que es la zona conocida, es lo que todos hacen y nadie se cuestiona, es lo “normal”- palabra que debería erradicarse del diccionario-, ¿qué es ser “normal”?

Entonces, la culpa llega, cuando sentimos que no estamos haciendo lo que “deberíamos hacer”, “cuando estamos yendo en contra de las “normas”, porque ya queremos o elegimos-sería lo ideal-, salirnos del montón para ser quienes queremos SER. Vivir desde nuestra autenticidad, y no según parámetros ajenos o de otras épocas, o que no s corresponden con la persona que quiero ser.

La paz viene con total entrega interior a lo que es. (David Hawkins)

Si te dijera, se tu misma/o, ¿qué me responderías?¿ qué te impide serlo?

En las respuestas, encontrarás tus creencias. Cuestiónalas. Fíjate si las querés seguir sosteniendo o es hora de cambiarlas por otras que te hagan sentir mejor. Porque no es el exterior lo que nos hace sentir mal, sino las ideas o creencias que tenemos en relación a eso que sucede fuera de nosotros..

…”Los apegos, las dependencias y la pequeñez interior nos hacen sentir débiles y limitados. La intolerancia culpable de nuestros pensamientos y sentimientos se proyecta en el mundo, que se presenta como un lugar terrible. Como mantenemos estos temores en la mente, literalmente, atraemos acontecimientos y experiencias terribles a nuestra experiencia de vida. El miedo deriva en ira crónica y nos hace propensos a los ataques y al caos emocional. Sufrimos y sentimos dolor, desesperación periódica y propensión a la alteración emocional. El ego-mente, que nos ve a todos separados, tiene envidia de cualquier persona que parezca felíz y exitosa, o con una relación o cuerpo mejor, o con mejores contactos. Pronto la falta de claridad interior sobre las metas produce una confusión que lleva a la autocompasión, la envidia y el resentimiento. La autocondena se proyecta sobre el mundo con la forma de condena de los demás, lo que aumenta todavía más la sensación de culpa y pequeñez. (pág 234) Libro: “Dejar ir”. Autor Dr. David Hawkins

En estas líneas que le compartí, se refleja el comportamiento y nuestro vacío interior al compararnos con los demás. Y cuando digo vacío, no quiero decir que no haya nada ahí, sino que no sabemos lo hay en nuestro interior. No nos conocemos, porque nos ocupamos más en saber, sobre la vida ajena o de los famosos que de nosotros mismos.

Esto no es un juicio o crítica hacia tu persona, lo hacemos de manera inconsciente. Te lo comparto porque fue una de las revelaciones o darme cuenta, más importantes para mi vida. Comenzar a ocuparme de mi, de lo que sentía y lo que elegía para mi vida.

Siempre podemos aprender de los demás. Viendo la actitud o vida de otras/os, te podés preguntar

¿Qué debo desarrollar en mí para tener esa actitud?

¿Cuáles son los primeros pasos para llegar dónde está esa persona?

¿Qué puedo aprender de ésta situación?

¿Cómo me sentiría si lo logro?

¿Qué estoy dispuesta/o a hacer para lograrlo?

¿Qué aspectos parecidos a los de esa persona ya los tengo?

¿Para qué quiero hacer esto? ¿Tiene que ver con una motivación o bienestar interno o es pensando en el exterior?

“Cuando reconocemos y soltamos los sentimientos negativos -y pasamos de la pequeñez al reconocimiento de nuestra grandeza, de modo que nuestra alegría proviene del placer de dar y amar-, entonces somos invulnerables a la pérdida. Cuando encontramos dentro el origen de la felicidad, somos inmunes a las pérdidas del mundo.” (pág. 100) Dejar ir. David Hawkins.

Amo leer, los libros me ayudan a conocerme y entender a los demás. Hoy les recomiendo dos. Uno se llama “Mapas emocionales”, de Federico Fros Campelo, donde nos cuenta sobre todo lo que compartimos como especie. Todos buscamos eso. Me ayudó a entender, que en el fondo somos todos iguales.

El otro, se llama “Dejar ir”, del cual extraje varias frases que las compartí en la nota. Es del Dr David Hawkins, un psiquiatra, que busca encontrar nuevas maneras de abordar sus consultas. Se dio cuenta de la relación de las emociones con algunas enfermedades que padecía. Me encanto la mirada que da a cada emoción y cómo impactaron en su vida.

“TU MUNDO INTERIOR, DEFINE TU MUNDO EXTERIOR”

Paula Vera

Docente- Coach

Instagram @sentir._ok