De manera saludable y a un año del inicio de la crisis sanitaria en nuestro país y sus medidas restrictivas, se aprecian cambios notables en el comportamiento de la población general y un claro ejemplo de esto, es el tradicional mate, que siempre fue un símbolo vinculado al acto de compartir, en las personas. Hoy ya no es extraño ver escenas como la de la foto, que muestra un termo rodeado de varios mates, fruto de las modificaciones en los hábitos higiénicos, de los cuales no escapan ni siquiera, las costumbres más aferradas a nuestra cultura nacional. Hoy «tomar un mate» es específicamente, compartir el agua del termo. Indudablemente la revisión de las prácticas consuetudinarias, en pos de aumentar los cuidados, arrojó resultados positivos, que aportan mucho en el combate por reducir los contagios virales.
Compartir el termo, no el mate
