• 07/12/2024 02:34

Estoy preocupada

Oct 8, 2024

Con el desarrollo de las habilidades socio-emocionales de los adolescentes y jóvenes
Con la falta de motivación
Con la falta de encontrar lo que realmente le gusta hacer
Con que quieren hacer algo que les de dinero, sin importar que eso les haga felíz
Con la falta de fortalecimiento de su cerebro para estudiar, imaginar y resolver problemas sencillos.
Con el desconocimiento de la biología humana, cerebro, emociones y cambios biológicos
Con la falta de iniciativa e ir por lo que ellos quieren
Con la falta de generar espacios y lugares por parte de ellos mismos para debatir, reflexionar y buscar las mejores estrategias para lograrlo.

Sin dudas debe haber algunos que se salen de la norma y responden positivamente a lo que les planteo anteriormente. “Las excepciones confirman la regla”.
Con el transcurso de los años, puedo ver en las escuelas como se va bajando la calidad educativa y yo le atribuyo “al que mucho abarca, poco aprieta”.
Las escuelas se están convirtiendo cada vez más, en responder cualquier problemática que surja en la sociedad. ¿Los chicos tienen hambre? La escuela les da el desayuno o la comida. ¿Hay embarazo adolescente? Damos ESI en la escuela. ¿Cambian las leyes educativas según el gobierno de turno? Los docentes debemos perfeccionarnos. ¿Aparecen las nuevas tecnologías? hay que dar TIC e incorporarlas en las clases. ¿Hay problemas de violencia o bulling? Hay que dar educación emocional. ¿Hay problemas de discriminación y falta integración? Hay que incluir a chicos y chicas con diferentes habilidades en el aula. ¿Me estoy quejando? Sí. ¿Estoy enojada? Si. ¿Estoy preocupada? Si.
La educación como cualquier otro ámbito, se va adaptando a las necesidades del momento y no digo que no haya que tener en cuenta estos temas en clase o en la educación, sino que debemos reenfocar las cosas.
Siento que solo se está “reaccionando a las dificultades del momento”. Tanto en lo económico y político, no se hace otra cosa que “tapar incendios”, pero no hay un norte. Un futuro y mucho menos lineamentos para seguir. Sabemos “mucho de todo”, pero no sabemos cómo aplicarlo en la vida cotidiana. Los chicos se sacan un 10 en química, pero no se animan a viajar solo en colectivo urbano. Saben hacer una empresa imaginaria, pero no tienen idea de cómo pagas los impuestos y el valor de las cosas.
A lo que voy, es que hay MUCHA INFORMACIÓN y muy poca se lleva a la práctica. Sabemos docentes y la sociedad adulta, que mucho de lo que nos enseñaron en la escuela y colegio secundario, incluso la universidad, no nos sirvió para nada. Obvio, debido a los cambios. Pero yo voy más allá. Más profundo como me gusta analizar y ver las cosas.
Si nos preguntamos ¿para qué me sirve esta información? ¿puedo aplicarla a mi vida? ¿me ayuda a resolver cuestiones personales del día a día? “Hoy en día hay que saber de todo”. “Hay que estar informados me dicen”. Pero siento que muchas veces esas cosas son distracciones y nos impiden desarrollarnos como seres humanos. Dejamos todo en manos de la tecnología, no usamos nuestro cerebro para crear y resolver. Les doy un ejemplo puntal que me pasa a diario en las escuelas y ¡nivel terciario! Cuando les doy un problema sencillo, ej: realizar un logo para tu emprendimiento o les pido una actividad creativa a los futuros docentes, no tienen ideas. Todo lo buscan con la IA,-Inteligencia Artificial,. Les cuesta un montón CREAR, imaginar. ¡Imaginar gente! Algo tan básico y sencillo como esto. Quedó en el pasado la frase que decía para “la imaginación no hay límites”.
Por supuesto que hago mi autocrítica como docente. Y tanto estudiantes como docentes podemos estar horas justificándonos. Pero así no se resuelven los problemas.
Los coach, buscamos otras miradas, otras soluciones y eso es lo que pretendo poner a debate.
Yo tengo mi hipótesis o idea. En vez de seguir “reaccionando a todo lo que aparece como problemática social” e incluirlo en el aula, ¿qué les parece enseñar a nuestros estudiantes a que se conozcan en todas sus dimensiones? Psicológico, emocional, biológico y espiritual.
Si nos enfocamos en estos aspectos de los seres humanos, las personas podrán hacer frente a cualquier situación que se les presente, tendrán recursos socio-emocionales para afrontar su vida.
Todos sabemos que la información vuela, se modifica todo el tiempo con nuevos descubrimientos y ¿entonces? ¿para qué seguir reproduciendo temas y acciones en el aula que sabemos que nos les lleva a nada? Tanto a estudiantes como docentes.
Los adolescentes y jóvenes, ya no tienen la capacidad o habilidad de retener ideas centrales de un tema, poder relacionar los contenidos con situaciones de la vida cotidiana. Llegan las fechas de exámenes y les genera mucha ansiedad, se bloquean. No tienen el hábito de estudiar y concentrarse, hacer un plan de trabajo y cumplir con esa rutina. Sus problemas personales los desequilibran y paraliza. No están acostumbrados a lidiar con el fracaso y la frustración, se derrumban y tienen poca tolerancia o resiliencia para poder volver a intentarlo.
Estoy preocupada. Creo que toda esa información que tenemos a disposición no está siendo aprovechada en su totalidad. Todos sabemos que somos seres únicos. En la escuela sabemos que no todos aprenden de la misma manera y no todos tienen las mismas inteligencias, -inteligencias múltiples-. Con toda esa diversidad debemos trabajar los docentes y eso dejando de lado, los problemas económicos, sociales y típicos de cada edad de nuestros estudiantes.¡ Ah! Me olvidaba. Cierto que los docentes somos humanos y también tenemos nuestros propios conflictos personales con los cuales debemos convivir. Ah, pero debemos motivar, hacer las clases interesantes, capacitarnos en tooooodos esos nuevos espacios que les mencioné anteriormente sino el peso de la ley y las criticas sociales caen sobre nuestras espaldas.
La Procastinación, es un mal de estos tiempos, tanto para ve como para los adultos. Como tengo miedo a fracasar o cometer algún error, postergo las cosas. O, por el contrario, me exijo tanto y quiero hacerlo a la perfección, que como no se dan las condiciones que espero, no lo empiezo o hago nunca.
¿La base de todo? Las emociones que esas exigencias del momento me generan y que muchas veces me frenan y me impiden avanzar. Las emociones que me superan porque no sé qué hacer con ellas y dejo que me dominen y decidan en mi vida.
Me imagino a éstos jóvenes teniendo que resolver problemas en una empresa, cómo cumplir las metas y vender más o cómo resolver los conflictos con el personal sin caer en el autoritarismo y deshumanización. Y no hablo de prepararlos para el trabajo como era antes en la revolución industrial. Hablo de prepararlos para la VIDA.
El desarrollo de las habilidades socio-emocionales, no solo te sirven para cómo enfrentar un examen o cumplir tus metas. La creatividad, -crea-actividad, – por ejemplo, también te sirve para resolver problemas de la vida cotidiana, ¿qué podés cocinar con los ingredientes que tenés?, ¿cómo haces si te olvidaste la billetera y no tenés plata para el cole urbano?, ¿cómo podés resolver de la mejor manera un conflicto o diferencia que tenés con un amigo?, ¿cómo podés hacer para organizarte y no gastar de más y llegar a fin de mes?, o todo lo contrario ¿cómo podés hacer para generar nuevos recursos con lo que YA SABÉS HACER?, ¿cómo podés hacer para detectar tus malas hábitos que te impiden lograr tus metas?, etc.

“La lista es interminable, lo que parece que se acaban son las ideas para resolver y crear”.
Estoy preocupada, sí. Hago lo que puedo.

Paula Vera
Docente-Coach
Instagram @sentir._ok