Las docentes de la Escuela 185, agredidas por la madre de un alumno, están afectadas física y psicológicamente. La Directora de la institución explicó que primero debe atender la integridad de sus alumnos y docentes. Por lo que recién ahora puede hablar de lo ocurrido.
Amanda Hartfield relató que «fue un hecho muy lamentable con la madre de un alumno, que ingresó a la escuela este año, había sido suspendido por mala conducta de otra institución. Los padres se acercaron a la escuela para que lo inscribamos a él y su hermano. Desde un principio mostró una conducta inadecuada, agresiva, no hacía caso a la maestra, peleaba con los compañeros, gritaba a los adultos con lenguaje muy obsceno. Por lo que se citó a los padres. La madre se presentó en el turno tarde con el hijo, hablaba con la docente cuando de repente se prendió de los cabellos de la maestra, la tiró al suelo, le propinó patadas. La Vicedirectora que quería separarla no podía porque tenía una fuerza descomunal. Después tomó un escobillón y con el palo empezó a golpear a la Vice en la cabeza, espalda. Los gritos, incluso del hijo que le pedía a la mamá que no pegue a las maestras, salieron otras docentes. Ahí atinaron a llamar a la policía, cuando notó esto, la mamá salió corriendo de la escuela y el chico detrás» relató.
La denuncia fue radicada en la Seccional Primera. Las docentes fueron trasladadas al Samic y ahora están de licencia. «Están doloridas, tanto la maestra como la Vicedirectora y traumadas psicológicamente. Tuvimos muchas demostraciones solidarias y de ayuda, del Consejo y otras organizaciones que tratan la problemática» señaló la Directora.
El niño debía venir hoy a la escuela, «nos preocupa ese alumno que evidentemente vive en un hogar violento, el niño va a ser contenido. Tenemos contención, mientras que la justicia decidirá en torno a esa madre. Nosotros pedimos custodia policial» destacó Hartfield.
La Escuela tiene una matrícula de 810 alumnos y 80 docentes.